La alimentación y el sueño son los 2 primeros hábitos que tiene que aprender un niño. Para que lleguen a convertirse en un hábito deben llevarse a cabo siempre en un mismo sitio, a la misma hora y de la misma manera.
El
niño debe adquirir el hábito de la alimentación desde su nacimiento para que no
se convierta en una fuente de conflicto. Adquirirlos no sólo influye en el
crecimiento, el bienestar y la salud del niño, también facilita la adquisición
de aprendizajes posteriores.
Cuando
un niño no come adecuadamente, sus padres conciben ideas como “si no consigo
que coma, enfermará y será por mi culpa”. Mantenerse firme en la instauración
del hábito evita manipulaciones por parte del niño.
¿POR QUÉ ES IMPORTANTE LA ALIMENTACIÓN?
La alimentación también influye en la evolución del habla porque contribuye al desarrollo de la musculatura de la boca y la garganta. También contribuye al aprendizaje en la resolución de conflictos. Los primeros problemas que surgen en la infancia son los relacionados con la alimentación y el sueño. Si se enseña a los niños a solucionarlos, serán capaces de enfrentarse a otros problemas en edades posteriores. Para tener buenos hábitos alimentarios en la edad adulta es preciso empezar a comer bien desde la infancia.
Comentarios
Publicar un comentario